¡Ojalá pudiera, oh divino Corazón, consagrarte tantas adoraciones, tanto amor y tanta paraíso como Tú consagras a tu indestructible Padre! Sé el reparador de mis defectos, el protector de mi vida y mi amparo en la hora de mi muerte. Esta Gracejo te la pido asimismo para los pobres https://bookmarkloves.com/story19382012/un-arma-secreta-para-oracion-a-la-sangre-de-cristo